Siguiendo con nuestra exploración de la psicología detrás de las posturas, hoy toca examinar los secretos que guardan las inversiones, es decir las posturas en donde el corazón está por encima de la cabeza, como el parado de manos, postura de vela, perro mirando hacia abajo, o el mismo parado de cabeza, entre otras.
Sí, las inversiones son un viaje mental y pueden ser un terreno fértil para observar nuestras tendencias y actitudes hacia abordar algo que es deseable pero difícil. Tenemos que preguntarnos para qué queremos hacerlo y para qué sirve.
Beneficios de las inversiones…
Las inversiones ayudan a llevar los muchos sistemas del cuerpo a un equilibrio armonioso, equilibrando no solo el cuerpo físico, sino también energético, emocional y mental, además de promover el desarrollo espiritual.
Las inversiones ejercitan el corazón y estimulan el retorno venoso. Muchos expertos dicen que esto es tan bueno para el cuerpo como el ejercicio aeróbico para promover un corazón sano y una buena circulación. Normalmente, una vez que las arterias han hecho circular sangre fresca oxigenada por todas las partes del cuerpo, las venas tienen que depender del movimiento muscular para contrarrestar la gravedad y devolver la sangre al corazón. Dar la vuelta permite que este retorno venoso se produzca sin esfuerzo. Esto también ayuda a prevenir las varices en las piernas. Cuando el cuerpo se invierte, el corazón descansa. Por lo general, el corazón tiene que trabajar duro todo el día y la noche contra la gravedad para mover la sangre oxigenada hacia el cerebro y por todo el cuerpo, pero cuando está boca abajo, la sangre fluye por sí sola sin que el corazón tenga que hacer todo el trabajo.
Dar la vuelta provoca que se estimule todo el sistema linfático, fortaleciendo así el sistema inmunológico, también estimula y nutre las glándulas endocrinas, especialmente las glándulas pituitaria y pineal, que al ser estimuladas por la presión creada en las inversiones liberan hormonas que regulan el metabolismo celular, aportando salud, equilibrio, claridad, vitalidad y optimismo a todo el cuerpo- mente.
El lado psicológico de las inversiones…
Cuando ponemos nuestros cuerpos patas arriba, literalmente estamos poniendo nuestro mundo patas arriba. Dar la vuelta nos permite experimentar la ventaja de diferentes actitudes y formas de percibir. Todo lo que conocemos como correcto, típico y normal se saca de debajo de nosotros. Esta desorientación requiere que recurramos a lugares de nuestra psique a los que quizás no hayamos accedido mucho antes. Para experimentar plenamente este nuevo ángulo de percepción, debemos relajar nuestros cuerpos y mentes y entregarnos a lo Divino con fe.
A través de las inversiones podemos experimentar una especie de regresión y renacimiento. Especialmente la experiencia provocada por sirsasana cuando nuestra cabeza descansa en el plano terrestre del suelo y se convierte en el asiento de la asana, nos encontramos yendo de cabeza hacia la Tierra, nuestra fuente. La sensación puede ser como sumergirse de cabeza en el útero. El resultado puede ser una renovación de la creatividad. Elevar físicamente nuestro corazón por encima de nuestra cabeza tiene un profundo efecto psicológico, ya que nuestro cerebro de sentimientos intuitivos, situado en el corazón, tiene prioridad sobre nuestra mente racional intelectual que juzga.
Aspectos espirituales…
Importante mencionar que existen ciertas contra indicaciones para personas que padezcan alguno de estos síntomas o condiciones:
- Lesiones en el cuello
- Glaucoma
- Lesiones en la espalda
- Menstruación
- Problemas coronarios
- En caso de embarazo se puede practicar esta postura siempre que la persona esté bien acostumbrada a ella. Se recomienda no comenzar la práctica de esta postura si está embarazada y no la ha practicado antes.
La recomendación como siempre es no practicar estas posturas sin la supervisión de un profesor debidamente acreditado para aprender a hacerlo de forma segura.
Como siempre insistimos en decirles, las posturas no son acrobacias, no es circo, como diría Pattabhi, cada una guarda secretos y tesoros que trabajan más allá de la fuerza y la flexibilidad del cuerpo físico. Entender esto es de vital importancia. En nuestro caso, cuando observamos que un alumno quiere ir más rápido de lo que requiere, es nuestra obligación frenarlo y explicarle el significado de la paciencia y la pausa, de disfrutar el camino y de retrasar la recompensa. Patanjali nos habla de desapegarnos de los resultados, esto significa en entrar desinteresadamente a nuestro tapete todos los días, sin expectativas de llegar a ningún lado, de hacer alguna cosa, más que SER. Dejarnos ser en el tapete.
Con cariño AriGonz
Namaste
¿Estás list@ para cambiar tu vida?
#juntémonosahaceryogadesdecasa